martes, 18 de octubre de 2011

Tónico casero.

   Hola a tod@s, qué tal? ... oh Dios mio, me he quedado sin tónico!  Que no cunda el pánico. Y es que para cuidarnos solemos usar productos ya elaborados, que comparamos en la perfumería o en el super ... y no nos damos cuenta de que a veces solo hace falta ir a la cocina!
   Hoy os quiero enseñar 2 productos que nos pueden sacar del apuro si nos hemos quedado sin tónico y no queremos pasar de usarlo.

CHAMPAN

    Lo primero es un producto común entre comillas, ya que solo se suele tener en casa para ocasiones especiales, pero muchas veces después de las fiestas nos sobran un par de botellas y no sabemos que hacer con ellas, y es el champan! La verdad es que yo no uso el champan como tónico si se me acaba el mio, si no que lo intento usar de vez en cuando como tónico aunque tenga del normal, más que nada también por lo que os he comentado de que no se que hacer con las botellas que me sobran de las celebraciones. Además ahora están muy de moda los tratamientos, cremas, lociones, etc a base de uva, y el champan es un tónico a base de uva perfecto.

   Las uvas son una gran fuente de antioxidantes, que sabemos que evitan el envejecimiento eliminando o neutralizando los radicales libres de nuestra piel, desintoxican. Además contienen polifenoles, que evitan la degradación de la elastina y el colágeno, con lo que ayudan a mantener la firmeza de la piel,y ácido tartárico que, no solo tiene propiedades anti-manchas, si no que deja una piel muy luminosa. Vamos que las uvas, y sus derivados, son una monería!


   Pero el champan tiene los beneficios añadidos de las burbujas, contribuyen a contraer los poros proporcionando un brillo radiante.
    No tenéis que preocuparos por que el alcohol pueda ser perjudicial para vuestra piel, ya que la mayoría de los tónicos astringentes tienen entre un 20 y un 60% de alcohol, y el champan solo tiene alrededor de un14%.
   Eso sí, las personas con la piel muy seca no deberían usarlo! (ni este ni cualquier otro producto astringente).
   Ya sabes, si te has quedado sin tónico o quieres probar un tónico a base de uva super refrescante solo tienes que coger un algodón, empaparlo en champan y usarlo como si fuese tu tónico habitual.


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ARROZ

   El otro producto, este sí muy común, y que además te saca del apuro en un momento, es el arroz. Mejor dicho el agua de arroz.

   El arroz ha sido utilizado desde hace miles de años en china  para la fabricación de productos cosméticos. El famoso cutis de porcelana de las Geishas es gracias al arroz, y muchos de sus cuidados de belleza eran base de este ingrediente.
   Suaviza e hidrata y también contiene, al igual que la uva, un gran aporte de antioxidantes gracias a sus acidos grasos y la vitamina E, que combaten los radicales libres. Cierra los poros y equilibra la producción de grasa en la piel. Sus peptidos y proteínas estimulan la reconstrucción de la piel dañada,... en fin, un lujo al alcance de todos.

   Para elaborar el agua de arroz lo único que tenemos que hacer es llenar medio cuenco de arroz, y echarle agua, mas o menos hasta que falte un dedo para llenar el cuenco. Removemos un poco y vemos que el agua se va enturbiando. Eso quiere decir que ya está lista el agua de arroz. Separamos el agua de arroz y la metemos en un tarrito. Ese agua es lo que usaremos como tónico! Y no os olvidéis de cocinar el arroz! Eso es una de las cosas que más me gusta de usar agua de arroz, que no se desperdicia nada. Y puede usarse para todo tipo de pieles.


   Y otra cosa que podéis hacer es usar diferentes tipos de arroz. Cada tipo de arroz contiene diferentes nutrientes y vitaminas, así que puedes matar 2 pájaros de un tiro innovando en la cocina usando un tipo de arroz diferente y usándolo para hacer el agua de arroz! 

 
     Buenos espero que os haya gustado y sobretodo que os sea útil. Si alguna vez os quedáis sin tónico ya tenéis solución! Hasta pronto!

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